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Una Mirada a la Parábola de las 10 Vírgenes

Hablando de Yom Teruah, la Fiesta de las Trompetas, uno de los nombres proféticos que se le ha dado a este día sagrado es las Bodas del Mesías. Y es que, como vimos en nuestro último estudio sobre la verdadera identidad de la Novia de Cristo, ya en la Ley y en los Profetas del Antiguo Testamento encontramos la simbología del matrimonio, aplicada a la relación entre Jehová y Su pueblo, Israel.


No existe realmente evidencia en el Nuevo Testamento de que Dios haya cambiado de idea con respecto a Su elección de Israel; lo que sí encontramos en el Nuevo Testamento, y especialmente en la Teología Paulina, es una apertura en la persona de Cristo, para que todos los gentiles que vengan a la fe en el Mesías puedan formar parte de la nación escogida y amada de Dios. Es muy importante entender esto, porque gran parte del trabajo de Pablo como apóstol de Jesucristo fue, precisamente, no sólo llevar el Evangelio a los gentiles, sino también reinterpretar y replantearse las Sagradas Escrituras a partir de la revelación del Mesías.

Desgraciadamente, tenemos una falsa teología que afirma que Dios rechazó a Israel, y por esa razón se hizo de un Nuevo Israel, el cual es la Iglesia de Cristo. Esta clase de enseñanzas no tiene sustento bíblico alguno, sino que parte de la necesidad histórica de reemplazar a Israel, robarle su identidad y en ocasiones, hasta intentar eliminarlo del mapa. Tristemente, ahora tenemos a un Israel resentido y profundamente prejuiciado contra el Cristianismo, traumatizado por experiencias dolorosas en el pasado. Ahora bien, entendemos que hay un propósito divino en todo esto, el cual ya estaba en la mente de Pablo cuando escribió en el capítulo 11 de su carta a los Romanos:


Romanos 11:25-26 NBLA

Porque no quiero, hermanos, que ignoren este misterio, para que no sean sabios en su propia opinión: que a Israel le ha acontecido un endurecimiento parcial hasta que haya entrado la plenitud de los gentiles. Así, todo Israel será salvo...

Hasta aquí, permítame preguntar: ¿A quiénes se refiere Pablo cuando habla de todo Israel? ¿A la totalidad del pueblo judío? ¿A la totalidad de todos los creyentes gentiles que hoy conforman la Iglesia? (Pues, aún la gran mayoría de judíos mesiánicos en la actualidad no se consideran a sí mismos cristianos). Ninguno de los dos! Para Pablo, todo Israel es el pueblo de Dios, judíos y gentiles por igual, que han sido redimidos y reconectados al Pacto y a las promesas de Abraham a través de la persona del Mesías! No todos los judíos estarán ahí (Romanos 9:27), pero todo Israel será salvo! ¿Por qué? Porque Israel es la identidad del verdadero pueblo de Dios, el cual será reunido al final de los tiempos! Sigamos leyendo en los versos 28 al 29:


v. 28-29

En cuanto al evangelio, son enemigos por causa de ustedes (¿Quiénes son enemigos? Se refiere aquí al Israel natural, original, que rechazó el evangelio), pero en cuanto a la elección de Dios, son amados por causa de los padres (¿Quiénes? El mismo Israel natural). Porque los dones y el llamamiento de Dios son irrevocables.


Wow! Espero que usted pueda percibir el valor de la verdad que hay en estos versículos: Pablo dice que el mismo Israel que ha sido endurecido por Dios para nuestro beneficio, el mismo Israel que ahora es enemigo del evangelio de Cristo, es amado con respecto a la elección de Dios! Si usted comprende realmente lo que esto significa, le garantizo que su perspectiva con respecto a la elección y la predestinación que enseñan las cartas paulinas cambiará totalmente, porque la Biblia dice que Israel fue escogido desde el principio! No sólo eso, Pablo continúa diciendo literalmente que los dones y el llamamiento (de Israel) son irrevocables! ¿Qué es algo irrevocable? Es algo que no puede cambiar, ni revertirse. Dios no le quitará el llamado a Israel para dárselo a otro pueblo! El no se arrepentirá de la promesa hecha a Israel para dársela a alguien más!


Ahora bien, usted no tiene que judaizar para convertirse en Israel; por el contrario, eso nos puede llevar muy lejos de la verdad, a desligarnos de Cristo. Usted es adoptado y nacionalizado Israel cuando se identifica con Cristo mediante el bautismo! No existe otra conexión que Cristo, aún para aquellos que tienen sangre hebrea corriendo por sus venas! Recuerde que hablamos sobre el terrible divorcio de Dios y de cómo el Mesías tuvo que morir para redimir a Su Esposa y limpiarla de toda contaminación de pecado, haciendo posible que, en términos de la Ley Mosaica, Jesús pueda volver a unirse con ella al final de los tiempos. Si Cristo el Esposo no hubiese muerto, de ninguna manera podría recibir a Israel de vuelta en una relación de Pacto Matrimonial, pero ahora hallamos que él estableció con ella un Nuevo Pacto (Jeremías 31:31-33), con la casa de Israel y con la casa de Judá: Pondré Mi ley dentro de ellos, y sobre sus corazones la escribiré (Esto es por la presencia y obra del Espíritu Santo). Entonces Yo seré su Dios y ellos serán Mi pueblo (v. 33).


No existe en la Escritura un Nuevo Pacto hecho con gentiles, porque la palabra gentil implica una desconexión y una falta de identidad con respecto al pueblo de Dios (1 Pedro 2:9-10, Efesios 2:12 y Gálatas 2:15). Si usted y yo no recibimos una nueva identidad en Cristo, y esta dentro del pueblo de Israel, es imposible que podamos heredar la salvación, acceder al Nuevo Pacto ó a las promesas de Dios. Todas estas cosas pertenecen a Israel! (Romanos 9:4) Por lo tanto, usted y yo necesariamente tenemos que identificarnos con Israel, y no como un pueblo aparte!


El apóstol Pablo utiliza una analogía muy interesante en Romanos 11:17-18 donde compara a Israel, la nación santa, con un olivo cultivado (Leeré la versión NTV por la claridad con que lo expresa):


Algunas ramas del árbol de Abraham—algunos del pueblo de Israel—han sido arrancadas; y ustedes, los gentiles, que eran ramas de un olivo silvestre, fueron injertados. Así que ahora ustedes también reciben la bendición que Dios prometió a Abraham y a sus hijos, con lo cual comparten con ellos el alimento nutritivo que proviene de la raíz del olivo especial de Dios. Así que no se jacten de haber sido injertados para reemplazar a las ramas que fueron arrancadas. Ustedes son solo una rama, no son la raíz.


v. 23-24

Y si el pueblo de Israel abandona su incredulidad, volverá a ser injertado, pues Dios tiene poder para volver a injertarlo en el árbol. Tú, por naturaleza, eras una rama cortada de un olivo silvestre. Por lo tanto, si Dios estuvo dispuesto a ir en contra de la naturaleza al injertarte en un árbol cultivado, él estará mucho más dispuesto a injertar las ramas originales en el árbol al que pertenecen.


Como acabamos de leer, usted y yo hemos sido injertados contra naturaleza en el buen olivo, pero Dios volverá a injertar a las ramas originales (entiéndase el Israel natural) y esa restauración plena marcará el momento de la Resurrección y el regreso de Cristo! Puedes leer/ escuchar nuestro estudio sobre la plena restauración de Israel en nuestro sitio/ canal de YouTube bajo el título El Sonido de la Restauración.


Es peligroso que la Iglesia de Jesucristo tenga una identidad aparte de Israel, o que piense que será perfeccionado aparte de Israel, y le diré por qué: Israel es la Novia que Cristo viene a buscar! Usted no encontrará ninguna referencia al rapto de la Iglesia en el libro de Apocalipsis, pero sí podrá hallar una referencia al rapto de Israel! No podrá encontrar una puerta del Templo Milenial por la que pueda entrar a adorar una Iglesia gentil, pero sí hallará los nombres de las doce tribus de Israel plasmados por todas partes en los escritos proféticos y apocalípticos sobre el Milenio y el Reino Mesiánico! No podrá identificar a la Iglesia como la Nueva Jerusalén que desciende del cielo, pero sí hallará que cada detalle en la descripción de esta hermosa ciudad simboliza a Israel!


Le prometo que retomaremos algunas de estas ideas en próximos estudios, pero ahora permítame volver a la Fiesta de las Trompetas como sombra profética de las Bodas del Mesías. Primeramente, necesito recordarle que una boda tradicional hebrea se celebraba en varias etapas y en un orden totalmente diferente al nuestro en Occidente:

(1) El acuerdo legal.

(2) La procesión del novio en busca de su prometida.

(3) El alegre regreso de la pareja al nuevo hogar en la casa del padre.

(4) La consumación de la unión matrimonial y

(5) El banquete de bodas.


En la antigua tradición hebrea, una vez que el novio y su familia daban su palabra a la familia de la novia, y esta aceptaba el contrato matrimonial, el compromiso se consideraba un pacto oficial. En primera etapa podemos ver reflejado al Mesías, el Novio, viniendo a buscar y salvar lo que se había perdido (Lucas 19:10) ¿Y qué exactamente se había perdido? Veamos.


En el Evangelio de Mateo, capítulo 15, encontramos el relato del encuentro de Jesús con una mujer cananea. La mujer daba voces detrás de los discípulos, pidiendo misericordia para su hija, atormentada por un demonio, pero ¿Qué le responde Jesús? Y respondiendo Él, dijo: No he sido enviado sino a las ovejas perdidas de la casa de Israel (Mateo 15:24). Inclusive la primera comisión de Maestro a los doce en Mateo 10:5-6 fue muy específica: A estos doce envió Jesús después de instruirlos, diciendo: "No vayan por el camino de los gentiles ni entren en ninguna ciudad de los samaritanos. Sino vayan más bien a las ovejas perdidas de la casa de Israel."


¡Otra vez las ovejas perdidas de la casa de Israel! Claro, sabemos que la Gran Comisión dice id por todo el mundo, pero está claro, y el propio Jesús dejó claro para qué venía! Ahora bien, usted y yo necesitamos situarnos en el momento histórico correcto, porque en el tiempo de Jesús las ovejas perdidas de Israel estaban literalmente perdidas! Es decir, las diez tribus que conformaban la Casa de Israel, que nunca regresaron del exilio, andaban dispersas por diferentes regiones y aún una parte de ellas se había mezclado con la Casa de Judá; entonces, el Señor no se refería sólamente a los judíos de su tiempo, él estaba hablando de un concepto mucho más amplio, que ya ni siquiera existía geográficamente como nación. Quizá el Señor tendría en mente las palabras del profeta Jeremías cuando dijo:


Jeremías 50:6 NBLA

Ovejas perdidas ha venido a ser mi pueblo;

sus pastores las han descarriado,

haciéndolas vagar por los montes;

han andado de monte en collado

y han olvidado su lugar de descanso.


Israel había dejado de ser una nación y se había tornado en un concepto! Y aunque ahora podrían haber regresado a la tierra, con el tiempo sus descendientes, la mayoría, habían olvidado su lugar de descanso! Las palabras de Jeremías se cumplieron, Dios se había divorciado de ellos, pero ahora el Mesías había venido para procurar una reconciliación con Israel! Es muy interesante comprender esto, porque puede abrirnos los ojos con respecto a muchas de las enseñanzas de Jesús, especialmente las parábolas de Jesús, pero ahora regresemos al tema de las bodas.


Después del compromiso inicial, los novios todavía tenían que permanecer separados por un cierto tiempo hasta el día de la boda. Durante este tiempo, ambos ultimaban detalles para la ceremonia y la vida en común; así que el novio procedía a preparar un lugar donde vivir con su futura esposa. Ese lugar, por lo general, era simplemente una adición a la casa de su padre.


Nota interesante: Si usted ha visitado el Medio Oriente, puede que se haya percatado de cómo las casas de familia parecen estar siempre en construcción hacia arriba. Esto sucede porque cada hijo, al contraer matrimonio, procura construir un piso encima de sus padres, donde pueda establecerse con su nueva familia. Creo que esta imagen de la vida cotidiana es muy útil para ayudarnos a comprender el contexto cultural de algunas de las más conocidas y peor interpretadas declaraciones de Jesús. Por ejemplo, cuando él dijo: En la casa de mi Padre muchas moradas hay. De otra manera, se los hubiera dicho. Voy, pues, a preparar lugar para ustedes. Y si voy y les preparo lugar, vendré otra vez y los tomaré conmigo para que donde yo esté ustedes también estén (Juan 14:2-3).


Sin duda, Jesús estaba haciendo una clara referencia a las costumbres nupciales de su época cuando se refirió a moradas en la casa del Padre. No sólo eso! El estaba dando a entender que era el Novio, entiéndase, el Mesías esperado de Israel! Preparar lugar para su prometida era lo que hacía cualquier novio antes de regresar por ella! Entonces, cuando ya el lugar estaba listo y la familia conforme, el padre del novio era la única persona con autoridad suficiente para otorgarle el permiso a su hijo, y determinar el momento de ir por la joven para traerla a su nuevo hogar. ¿Recuerdas cuándo el Señor dijo: Pero acerca de aquel día y aquella hora, nadie sabe; ni siquiera los ángeles de los cielos, ni aun el Hijo, sino solo el Padre (Mateo 24:36)?


Esta es una de las declaraciones más controversiales de Jesús! Sin embargo, es muy probable que estuviese simplemente diciendo: Recuerden que yo soy el Novio. Regresaré tan sorpresivamente como cualquier novio. Así que, necesitan estar alerta! Aunque sabemos que Jesús estaba en un estuche humano, después de haber abandonado su gloria inicial (como dice la carta a los Filipenses), también vale decir que el énfasis de su discurso no se encuentra en admitir que él mismo no tenía idea de cuándo exactamente regresaría a la Tierra, sino más bien en resaltar la importancia de que la Novia debería estar siempre expectante y lista para recibirle!


Finalmente, el regreso del novio se encuentra prefigurado en la celebración sagrada de la Fiesta de las Trompetas, ya que de todas las mencionadas partes de un matrimonio tradicional, la llegada del novio por su prometida era especialmente anunciada y acompañada por el toque del shofar entre gritos de: ¡Aquí está el novio! ¡Salgan a recibirlo! (Mateo 25:6).


No podemos ser dogmáticos en cuanto a qué aspecto de la ceremonia de bodas corresponde a Yom Teruah y qué aspecto representa Yom Kippur (el Día de la Expiación) porque, como hemos dicho antes y es la opinión de este ministerio, ambos eventos forman parte de la Segunda Venida de Cristo.


Con relación a este tema, Jesús refirió a sus discípulos la parábola de las diez vírgenes en Mateo 25, la cual habla del regreso de un novio. Tradicionalmente, el novio regresaba alrededor de la media noche para llevarse a su prometida, quien era escoltada por un grupo de damas de compañía. La historia nos deja ver que las jóvenes acompañantes de esta novia eran diez, y que todas se quedaron dormidas esperando al novio.


Vamos a ver, las diez jóvenes no son diez novias, pero ellas representan figurativamente a la Novia. También hay otro detalle importante en el número de las damas de compañía. ¿Por qué piensa usted que Jesús incluyó exactamente diez vírgenes en su historia? Lo primero es que ellas representan a la Novia, y por lo tanto, representan a Israel. Ya hemos dicho que en el tiempo de Jesús, las diez tribus de la Casa de Israel estaban perdidas o esparcidas, mientras que las dos tribus que representaban a la Casa de Judá estaban de vuelta en su tierra.


Parte del simbolismo profético del número 10 en la Biblia es que está relacionado con la Casa de Israel, pero también este número puede indicar una cantidad representativa ó la cantidad mínima para conformar una asamblea. Otro aspecto relacionado con el número 10 en la Biblia es que puede vincularse a la paciencia necesaria para atravesar un período de prueba.


Por ejemplo, diez veces engañó Labán a Jacob cambiándole el salario (Génesis 31:7); diez fueron las plagas derramadas sobre Egipto antes de que Faraón dejara ir al pueblo de Israel (Éxodo ); diez fueron los mandamientos dados por Dios a Israel para probar su obediencia; diez fue el número de veces que el pueblo tentó a Dios en el desierto (Números 14:22); cuando Daniel y sus compañeron decidieron no contaminarse con la comida del rey, ellos fueron sometidos a un período de prueba de 10 días (Daniel 1:14); y diez son los días entre Yom Teruah (Trompetas) y Yom Kippur (Expiaciones), conocidos como los Días Terribles. Por último, en el libro de Apocalipsis, el Cristo glorificado da aviso a la iglesia de Esmirna sobre un período de 10 días de gran persecución y prueba que estaba por sufrir (Apocalipsis 2:10).


No es casualidad que las jóvenes doncellas de nuestra historia hayan sido diez, pues ellas representan a toda la asamblea ó congregación de Israel a través de un período de densa oscuridad y prueba. De acuerdo con la tradición, el novio llegaba sin previo aviso alrededor de la media noche, por lo que todos los participantes de la comitiva nupcial debían llevar sus propias lámparas de aceite. Jesús nos aclara que cinco de las doncellas eran prudentes y cinco insensatas. Las prudentes llevaron el aceite suficiente para todo el trayecto, las insensatas se quedaron sin aceite.


Veamos algunos detalles. El número cinco se relaciona generalmente con la gracia de Dios, aunque no profundizaremos en eso ahora mismo). ¿Qué significado deberíamos otorgarle a las lámparas? En este caso, podemos afirmar con bastante precisión que las lámparas simbolizan la instrucción de Dios, las Sagradas Escrituras, los mandamientos ó instrucciones del Señor e inclusive, las enseñanzas de Jesús. El Salmo 119:105 declara: Tu palabra es una lámpara a mis pies; ¡es la luz que ilumina mi camino! (RVC). Aún más específico es el proverbista cuando dice: El mandamiento es una lámpara, la enseñanza es una luz... (Proverbios 6:23 PDT) El término enseñanza se refiere aquí a la Ley de Jehová.


¿Cuál es el problema entonces con las doncellas insensatas? Ellas representan a quienes reciben la Palabra de Dios pero no la obedecen! Este es un tema recurrente dentro de la enseñanza de Jesús, así que podemos simplemente preguntarnos: ¿A quiénes llama Jesús insensatos y a quiénes llama prudentes? Todo el que me oye estas palabras y las pone en práctica -dice el Maestro- es como un hombre prudente que construyó su casa sobre la roca (... ) En cambio, todo el que oye mis palabras y no las pone en práctica -dice también- es como un hombre insensato que construyó su casa sobre la arena... (Mateo 7:24-26 NVI frag.) ¿Quiénes son los tontos sino aquellos que no aprecian la instrucción del Señor? Los necios desprecian la sabiduría y la instrucción (Proverbios 1:7).


A la simbología de las lámparas debemos añadir la figura del aceite. El aceite de oliva es el combustible de estas lámparas y el elemento que se les termina a las jóvenes insensatas. En sentido general, el aceite simboliza la unción del Espíritu Santo, y por lo tanto a los ungidos, gente separada y sobrenaturalmente capacitada por el Espíritu para un propósito especial; sin embargo, hay algo más sobre el simbolismo profético del olivo que puede interesarnos. ¿Recuerdas las palabras del apóstol Pablo sobre el buen olivo? En la literatura profética del Antiguo Testamento el árbol de olivo representa a la nación de Israel.


Jeremías 11:16-17 DHH

¿Qué busca Israel, mi amada, en mi templo...?

El Señor te había llamado «olivo frondoso,

cargado de hermosos frutos...

Pero en medio de fuertes truenos

él prendió fuego a tus hojas...


Desgraciadamente, este olivo frondoso se convirtió más tarde en un olivo sacudido a causa del juicio divino que resultó en el exilio, sin embargo, ya la profecía de Isaías nos habla de un remanente ó residuo de Israel, el cual jugará un papel sumamente importante en los últimos tiempos:


Isaías 17:4 y 6-7 NTV frag.

En aquel día, la gloria de Israel se desvanecerá... Solo quedarán unos cuantos de su pueblo, como aceitunas sueltas en un olivo (sacudido) después de la cosecha... Entonces, por fin el pueblo buscará a su Creador y volverá los ojos al Santo de Israel.


Isaías 24:13-14 NTV

Es lo mismo en toda la tierra: Solo queda un remanente, como las aceitunas sueltas que quedan en el olivo... Pero los que quedaron, gritan y cantan de alegría; los del occidente alaban la majestad del Señor.

Es muy interesante que la palabra remanente se utilice en esta versión de la Biblia para describir las pocas aceitunas que quedaban en el olivo después de la cosecha, y es que existe una conexión profética entre la simbología del aceite de oliva y el concepto del Remanente de Israel. La palabra original que se traduce como remanente en el Antiguo Testamento proviene de una raíz antigua (H7604) que puede entenderse literalmente como 'presiona el inicio' y que describe la forma en que se entretejían las cuerdas en los tiempos bíblicos. Este detalle puede indicar, entre otras cosas, que el remanente es el residuo, lo que queda luego de ejercer una cierta presión. También la idea del remanente implica que hay una continuidad.


Esto me recuerda el proceso del olivo. Para poder obtener el aceite de oliva se tiene que triturar ó machacar las aceitunas hasta lograr una consistencia pastosa, luego esa masa se bate durante unos minutos más y se filtra en una prensa. En tiempos de Jesús la gente colocaba las aceitunas en grandes depósitos de piedra donde eran manualmente procesadas bajo la presión de otra gran piedra redonda a manera de molino. Esta piedra redonda se hacía rodar sobre la masa tantas veces como fueran necesarias para hacer brotar el aceite, que terminaba saliendo por una abertura hacia un recipiente en el suelo.


Esta imágen profética tomada de la vida cotidiana es tan significativa en la Biblia, que se aplica al Mesías (el Ungido) a quien encontramos orando y sangrando en el huerto de Getsemaní (en Hebreo, 'prensa de aceite') la misma noche en que fue apresado, y ¿cuál fue el resultado de su intenso dolor y sufrimiento? El profeta Isaías escribe: Formaba parte del buen plan del Señor aplastarlo y causarle dolor. Sin embargo, cuando su vida sea entregada en ofrenda por el pecado, tendrá muchos descendientes (Isaías 53:10 NTV). Observa cómo Jesús fue presionado por Dios al inicio para producir una continuidad al final; este es el principio del Remanente! El Remanente de Israel es el que porta el aceite, entiéndase la unción de Dios para perseverar en medio de las pruebas y vencer al sistema de este mundo.


Ahora bien, recuperemos el hilo de nuestra historia. Cuando suena el shofar anunciando la cercanía del novio, cinco de las jóvenes no tenían el aceite suficiente para partir con la comitiva nupcial hasta la casa del padre del novio, donde se celebraba el banquete de bodas. Ellas no eran sensatas, como las primeras cinco, y tuvieron que salir a comprar aceite para sus lámparas. Desgraciadamente, aunque estas terminaron haciendo lo correcto, lo hicieron fuera del tiempo aceptable, y no pudieron llegar al banquete antes de que se cerrara la puerta. ¿Qué sucedió con ellas, entonces? Jesús continúa contando:“Señor, ábrenos”, gritaron tocando a la puerta, pero la respuesta del novio en el verso 12 no se hizo esperar: ¡No sé quiénes son ustedes! ¡Váyanse de aquí! (NBV).


Quizá nos sorprenda una respuesta tan extrema en un día tan feliz, pero la actitud del novio refleja su descontento. Las cinco jóvenes descuidadas ya no eran bienvenidas en la fiesta de bodas porque habían faltado a su deber para con la novia y dejado a toda la familia en ridículo. Una cosa es cierta, las diez jóvenes eran parte del cortejo de la novia, pero no eran la novia! Este detalle es muy interesante porque nos lleva a preguntarnos qué tan bien hemos comprendido la parábola hasta ahora. En realidad, la novia nunca faltó a su promesa. La Novia ya estaba adentro!


Está claro que las cinco jóvenes insensatas no son parte del Remanente de Israel porque ellas se quedaron sin aceite en medio de la oscuridad de la noche. El Señor dijo: Debido al aumento de la iniquidad, el amor de muchos se enfriará. Pero el que persevere hasta el fin, ese será salvo (Mateo 24:12-13 LBLA). Es una realidad que no todos perseveran! Recuerde la Parábola del Sembrador: Muchos escuchan el mensaje de Dios y parecen haberlo recibido, pero no llegan a dar fruto. Ellos no son parte del Remanente porque el Remanente persevera! El Remanente permanece unido al olivo y hace la voluntad del Padre Celestial. Jesús dijo:


Mateo 7:20-23 NBLA

Por sus frutos los conocerán.

No todo el que me dice: “Señor, Señor”, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de Mi Padre que está en los cielos. Muchos me dirán en aquel día: “Señor, Señor, ¿no profetizamos en Tu nombre, y en Tu nombre echamos fuera demonios, y en Tu nombre hicimos muchos milagros?”. Entonces les declararé: Jamás los conocí; apártense de Mí, los que practican la iniquidad”.


No sé quiénes son ustedes! Esta es la misma respuesta que recibieron las cinco doncellas insensatas. El contexto de Mateo 7 nos confirma que, a diferencia de las primeras cinco, ellas recibieron la instrucción de Dios pero no la obedecieron; por el contrario, ellas representan a quienes practican la iniquidad. Iniquidad (G458) es la condición de alguien que vive sin Ley, en este caso, que vive transgrediendo la Ley de Dios, por lo tanto, cualquiera que vive en desobediencia no es parte de la Novia.


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